En mi entrega del pasado 30 a abril, en la última sección señalé lo siguiente:

“ALFREDO CASTILLO EN MORELIA.

Nadie me lo platicó, yo lo vi, ALFREDO CASTILLO CERVANTES en Morelia en plena actividad política, estuvo desayunando por allí, al derredor de las 10 de la mañana en el restaurante del Hotel Holiday Inn este domingo 28 de abril, con la diputada de MORENA en el congreso de Michoacán CRISTINA PORTILLO AYALA y el diputado plurinominal del PRI EDUARDO ORIHUELA ESTEFAN.

Del “bebé” ORIHUELA no me sorprende que se reúna con un tipo con la antecedencia de ALFREDO CASTILLO, pues cojean casi de la misma pata, pero de la que, si me sorprende algo, solo algo, es de la diputada ahora del partido Movimiento de Regeneración Nacional CRISTINA PORTILLO, pues se supone que CASTILLO significa el mal y el episodio más negro de la vida de Michoacán y PORTILLO AYALA ya está perdonada de su perredismo y es pura de MORENA. ¿Qué estarían negociando? O…
¿Tendrá que ver con el conflicto al interior de la secretaría de seguridad pública la presencia en Michoacán de ALFREDO CASTILLO CERVANTES?”

A consecuencia de lo escrito, la diputada PORTILLO AYALA, mandó a varios emisarios con la petición de que se “bajara” la nota o que se me emplazaría a probar mi dicho, negándome de manera rotunda a la petición de “bajar” la nota y por el contrario, esperar el emplazamiento a probar mi dicho, de manera que el viernes 03 de mayo, se apersonó en mi domicilio particular el señor RAFAEL MALPICA representante de la señora CRISTINA PORTILLO AYALA y entregó un documento que contiene la petición del “derecho de réplica”.

El escrito de réplica suscrito por la señora CRISTINA PORTILLO AYALA, cuyo texto ella hizo público a través de las redes sociales, señala en lo medular lo siguiente:

“1.- Es absolutamente falso, como afirma, que, en mi carácter de diputada de Morena en esta Septuagésima Cuarta Legislatura del Congreso de Michoacán, haya sostenido el pasado 28 de abril, o cualquier otro día, un encuentro con el señor Alfredo Castillo Cervantes, ex comisionado presidencial en Michoacán, asignado a tareas de seguridad por el ex presidente Enrique Peña Nieto.

2.- Y menos aún, una “acuerdo” o “negociación”, de alguna naturaleza. Esa afirmación es falsa y dolosa.

3.- Como sus señalamientos escritos en realidad son palabras llanas y son insostenibles, y dado que a usted corresponde la carga de la prueba, le pido publicar el soporte testimonial que compruebe este encuentro.

4.- Más allá que mis compañeros diputados Eduardo Orihuela y Marco Polo Aguirre, responderá a su definición, no solo niego mi encuentro con el señor Alfredo Castillo, sino que categóricamente rechazo su insidiosa insinuación sobre una negociación el él y, de hecho, con nadie. Mi voluntad política, mi ideología, mis valores y principios, no son negociables. Lamento profundamente que, al amparo del derecho a la libre expresión de las ideas que gozamos todo los mexicanos y mexicanas, lance usted esas aseveraciones, solo con el propósito de crear confusión y dañar mi imagen personal. No es la primera vez que usted, ha escrito sobre mi, textos carentes de verdad.

5.- Señor Saavedra: Soy una mujer michoacana, que se desempeña en el ámbito de la política. Mi conducta profesional, se apega a mis principios y valores personales. Estoy consiente que mi trabajo como legisladora, y más de Morena, es de una gran exposición pública y, por eso, respeto a los demás y exijo respeto en el contexto de mi vida privada. Sostengo lo dicho al principio: Si tiene usted las pruebas de su afirmación, lo emplazo a que las publique. De cualquier forma, me reservo acudir a las instancias judiciales correspondientes, para proteger mi imagen personal.”

Con la transcripción literal del texto del escrito de la señora CRISTINA PORTILLO AYALA, respetando absolutamente la sintaxis y la ortografía del mismo, doy por cumplido el otorgar el derecho de réplica, pues se hace público en el mismo lugar y no solo eso, sino le otorgo mayor espacio que el que la ley me señala, a más de allanarme voluntariamente a él.

CONTRA RÉPLICA.

En primera instancia, ruego una disculpa a mis amables lectores, por abordar este tipo de asuntos, que parecieran pertenecer a otra ventanilla que, al quehacer periodístico, empero, el ejercicio vertical e independiente de la libertad de expresión tiene como riesgo, el enfrentar todo tipo de censuras, ataques e intimidaciones y en el caso de este escribidor, esa circunstancia la he enfrentado reiteradamente y esta vez, no será la excepción.

En principio, sigo teniendo extrañamiento en la manera de conducirse de la señora legisladora PORTILLO AYALA, pues de público conocimiento es que, en la edad adulta ingresó a la facultad de derecho de la UMSNH a estudiar la carrera de derecho y ciencia sociales, acción plausible, lo que nos obliga a inferir que es perita en derecho.

Así las cosas, reitero que es extraño que siendo perita en derecho, me exija que haga públicas mis pruebas testimoniales en la que apoyaría mi dicho sobre el actuar de la legisladora, puesto que ninguna ley me obliga a hacerlo, la secrecía de las denominadas “fuentes” es fundamental en el ejercicio del periodismo.

No obstante, lo anterior, de ser necesario, en el momento procesal oportuno y con el apoyo de la autoridad jurisdiccional correspondiente, habré de demostrar circunstancialmente, que la señora CRISTINA PORTILLO estuvo a la hora señalada por este escribidor en el restaurante del Hotel Holiday Inn de eta ciudad capital.

De la misma manera, probaré que el señor ALFREDO CASTILLO CERVANTES estuvo a la misma hora, en el mismo hotel que la legisladora, así como la presencia de los también diputados EDUARDO ORIHUELA ESTEFAN y MARCO POLO AGUIRRE y que, de lo escuchado por este escribidor relacionado con sumas y restas de votos, a más del resultado de la sesión del congreso del estado del pasado 30 abril, se infiere que la reunión tuvo por objeto sacar adelante el “dictamen de minoría” en dicha sesión.

Finalmente, debo de señalar a la señora diputada CRISTINA PORTILLO AYALA, que este escribidor nunca se ha metido en su vida privada, la vida privada de los políticos no es material periodístico para un servidor por estrepitosa y escandalosa que fuere, no así su vida política y más en este momento, en que es empleada de los michoacanos al percibir un sueldo con cargo al erario público.

De la calidad moral y ética de este escribidor hablan los más de 45 años en la comunicación desde diversas trincheras, cuya característica ha sido el acompañar con pruebas documentales, testimoniales, de otros tipos el 99% de mis artículos, el otro 1%, es de probanza circunstancial basada en el prestigio que genera un periodismo sin patrocinios vergonzantes.

A usted misma señora diputada PORTILLO AYALA, este escribidor le ha rechazado ofrecimientos en lo económico a través de los acostumbrados intermediarios, durante su paso por la 72 legislatura, los que le señalo, para probarle que no es el interés económico mezquino el que guía mis artículos periodísticos y aún en la actual legislatura, he publicado en los medios de comunicación que dirijo, información de usted a cambio de nada y son sus propios compañeros legisladores, los que podrán dar testimonio de que nunca les he pedido un solo centavo.

Señora diputada, dejo por aquí, la sentencia de un juicio de amparo en revisión, que puede ilustrar su amplio conocimiento jurídico:

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