Morelia, Michoacán., a 22 de marzo de 2018.- Las personas con síndrome de Down deben disfrutar plenamente sus derechos fundamentales, por ello deben fortalecerse los objetivos de desarrollo que promueven la igualdad y ayuden a forjar una vida digna para todas y todos, resaltó la diputada presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en la LXXIII Legislatura Local, Nalleli Pedraza Huerta.

 Al hacer uso de la tribuna para fijar un posicionamiento en relación al Día Mundial del Síndrome de Down que se conmemoró este 21 de marzo, la diputada integrante de Grupo Parlamentario del PRD llamó a celebrar este día con un cambio de conciencia y un cambio de actitud, “pero principalmente a ustedes compañeras y compañeros legisladores, los invito a que desde su ámbito promuevan y defiendan el ejercicio de los derechos de quienes más lo necesitan.”

“Quienes estamos hoy en este recinto asumiendo una representación popular, los invito a que seamos agentes de transformación de conciencias y llevemos un mensaje de inclusión, de no discriminación, de igualdad, de respeto, de dignidad”.

La legisladora mencionó que de acuerdo con información que provee el Sistema Nacional de Información en Salud, se ha podido estimar que por cada diez mil nacimientos, cuatro se trata de niños o niñas con síndrome de Down.

Las personas con síndrome de Down, dijo es susceptible a desarrollar padecimientos muy específicos y previsibles, principalmente en el rubro de salud. “Es una población cuyas necesidades son identificables de manera muy acuciosa por diversas organizaciones, y en diversos estudios. Y se trata de necesidades que les permitan adquirir y ejercer sus derechos en el plano educativo, deportivo, laboral, afectivo”.

Sin embargo, añadió que aun siendo tan previsibles sus necesidades, siguen existiendo graves brechas en la atención de las mismas, ya que existe un vacío en la respuesta institucional, que pueda hacer factible y real sus derechos y su inclusión.

Remarcó que las personas con discapacidad deben disfrutar de una vida plena y digna, en condiciones que aseguren su dignidad, fomenten su autonomía y faciliten su participación activa en la comunidad y su goce pleno de todos los derechos humanos y libertades fundamentales en igualdad de condiciones con las demás personas.   

Finalmente Nalleli Pedraza manifestó “soy afortunada de disfrutar el amor y el humor de mi hija Antonella, pues ella me ha enseñado mucho más de lo que yo pudiera jamás enseñarle. Me ha permitido sensibilizarme de un segundo a otro, y mi tarea es poder trasmitir esta necesidad de sensibilizarnos, de humanizarnos, y de reconocer la necesidad de aumentar la conciencia social sobre esta realidad, e intensificar esfuerzos contra el estigma, la segregación y el maltrato físico y psicológico a que lamentablemente son sometidas algunas personas en esta condición”.

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